Todo lo que necesitas saber sobre la normativa CAFE

Si bien ya sabíamos de la existencia de la normativa CAFE desde 2020, lo cierto es que no ha sido hasta este año 2025 cuándo la Unión Europea ha puesto el límite de emisiones de CO₂ en 93,6 gramos, una diferencia de casi 21,5 gramos que puede suponer un gran contratiempo para las marcas.

Pero, ¿cómo puede influir esto en la decisión de comprar un coche eléctrico? Desde Volkswagen Canarias te lo vamos a explicar de forma clara y concisa.

La normativa CAFE es aquella regulación de la Unión Europea que tiene como objetivo primordial reducir las emisiones de CO₂ de los nuevos vehículos. Así pues, a partir de 2025 los fabricantes, en los que se encuentra Volkswagen, tendrán que garantizar que la media de emisiones de sus vehículos no supere los 93,6 gramos.

Hasta el pasado año, el límite de emisiones se situaba en 115,1 gramos, por lo que el cambio supone un enorme esfuerzo para la industria del automóvil.

La normativa CAFE de emisiones establece que, las marcas de automóviles, pagarán una multa de 95 euros por cada gramo de CO₂ que superen de los 93,6 gramos por kilómetro establecido en la normativa.

Por esta razón, la sanción se aplicará a cada unidad vendida, por lo que si un fabricante sobre pasa los limites y registrar un elevado número de ventas, las sanciones pueden alcanzar cifras millonarias. Desde la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles (ACEA) se advierte de que la suma podría alcanzar los 15.000 millones de euros para toda la industria. 

Con el firme propósito de evitar el impacto económico por las elevadas sanciones, varios grupos de fabricantes han decidido formar asociaciones estratégicas. 

Un ejemplo de alianzas entre marcas es Tesla, cuyos coches 100% eléctricos, venden “créditos de carbono” a otras marcas. Con esta iniciativa los fabricantes buscan compensar los excesos cometidos comprando la diferencia a quienes están muy por debajo de los límites exigidos.

A pesar de que pueda parecer una práctica elusiva, en realidad es una solución que se encuentra perfectamente dentro del marco legal. La normativa europea permite el libre comercio de derechos de emisión de gases contaminantes. 

La transición hacia una movilidad más sostenible se ha convertido en un pilar fundamental dentro de la industria automotriz. 

Para cumplir con las normativas medioambientales y reducir la huella de carbono, los fabricantes están destinando grandes sumas de dinero al desarrollo de vehículos eléctricos e híbridos, al tiempo que buscan optimizar el rendimiento de los motores de combustión interna.

Para lograr una mayor eficiencia energética y minimizar el impacto ambiental, el sector está implementando diversas estrategias, entre ellas:

• Reducir el peso de los automóviles, lo que se traduce en un menor consumo de energía.
• Diseño aerodinámico optimizado, que disminuye la resistencia al aire y mejora la eficiencia del vehículo.
• Apuesta por nuevas tecnologías, como los combustibles alternativos y sintéticos, que representan una alternativa viable a largo plazo.

Por otro lado, las políticas gubernamentales juegan un papel significativo en este proceso. A través de incentivos fiscales y subvenciones, cada vez más conductores están optando por vehículos eléctricos, facilitando así la adopción de tecnologías más limpias y accesibles para el público en general.

La normativa CAFE no solo es un desafío para los fabricantes, sino también una oportunidad para acelerar la transición hacia una movilidad más sostenible. Aunque supone un esfuerzo económico y logístico importante, también está impulsando la innovación en el sector.

Para las personas que están pensando en comprar un coche eléctrico, esta normativa es una gran noticia. De cara a 2025, encontrarán una oferta más amplia, tecnologías avanzadas y mejores ayudas para hacer realidad su apuesta por la movilidad limpia.